martes, 28 de abril de 2009

Diario de oficina 1





Me podría resumir:
Mi vida es una suma de apuntes escritos en pequeños papeles perdidos sobre un montón de mesas, bolsillos, escritorios de oficina y cuadernos. He extraviado con el correr de los años la mitad de lo que alguna vez quise decir. Por momentos tengo la sensación; incluso, de haber perdido hasta la voz.
Llevo pegado a la silla cuarenta minutos. Hablé con Leandro por teléfono y me alegró escucharlo. Quedamos mañana para comer.
En una oficina la gente abre las puertas ajenas como si fuesen suyas. No hay sentido de propiedad aquí.
Defiendo mi cueva agachándome y escondiéndome detrás de la máquina.
No debería decirlo otra vez pero lo digo igual, me siento muy solo y estar aquí no me ayuda.
Me llaman para que vaya a ver un montaje a la sala de audio. Un montaje más que; irónicamente, desmonta mi tranquilidad.
Pongo mi mejor cara de aviso y me levanto de la silla.
El que pueda que se salve.








3 comentarios:

  1. AHORA YA SE DONDE ESTÁS CUANDO NO TE ENCUENTRO.
    ATRAS DEL ORDENADOR

    ABRAZO GRANDE TUTETA, SI TOCA TU CHICA AVISÁ

    Juana

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  2. palabras perídas en papeles y melodías
    se hacen compañeras de vida.
    Te traen cerca a mí, a pesar de un mar de distancia.
    Estás sin estar.
    Cierro los ojos y vuelo allá,
    aunque sea solo por un rato en está noche voy a estar con vos,
    tu guitarra y yo.

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  3. no hay sentido de la propiedad en muchos lados

    yo tengo parte de esas letras perdidas en mis recuerdos,
    no se perdieron tanto.
    crecimos entre ensayos, letras, música,
    siempre va a estar ahí.

    es lindo volver a leerte luego de tantos años

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