Me podría resumir:
Mi vida es una suma de apuntes escritos en pequeños papeles perdidos sobre un montón de mesas, bolsillos, escritorios de oficina y cuadernos. He extraviado con el correr de los años la mitad de lo que alguna vez quise decir. Por momentos tengo la sensación; incluso, de haber perdido hasta la voz.
Llevo pegado a la silla cuarenta minutos. Hablé con Leandro por teléfono y me alegró escucharlo. Quedamos mañana para comer.
En una oficina la gente abre las puertas ajenas como si fuesen suyas. No hay sentido de propiedad aquí.
Defiendo mi cueva agachándome y escondiéndome detrás de la máquina.
No debería decirlo otra vez pero lo digo igual, me siento muy solo y estar aquí no me ayuda.
Me llaman para que vaya a ver un montaje a la sala de audio. Un montaje más que; irónicamente, desmonta mi tranquilidad.
Pongo mi mejor cara de aviso y me levanto de la silla.
El que pueda que se salve.
AHORA YA SE DONDE ESTÁS CUANDO NO TE ENCUENTRO.
ResponderEliminarATRAS DEL ORDENADOR
ABRAZO GRANDE TUTETA, SI TOCA TU CHICA AVISÁ
Juana
palabras perídas en papeles y melodías
ResponderEliminarse hacen compañeras de vida.
Te traen cerca a mí, a pesar de un mar de distancia.
Estás sin estar.
Cierro los ojos y vuelo allá,
aunque sea solo por un rato en está noche voy a estar con vos,
tu guitarra y yo.
no hay sentido de la propiedad en muchos lados
ResponderEliminaryo tengo parte de esas letras perdidas en mis recuerdos,
no se perdieron tanto.
crecimos entre ensayos, letras, música,
siempre va a estar ahí.
es lindo volver a leerte luego de tantos años